(Juan Ignacio Castillo). La Semana Santa 2015 de Alhaurín de la Torre empezó de la mejor manera posible: Domingo de Ramos con un sol radiante y altas temperaturas que invitaban a todo y con la salida procesional de la Ilustre Cofradía de Ntro. Padre Jesús de la Paz y el Amor, en su entrada en Jerusalén, y María Stma. de la Esperanza, denominada «Pollinica».
Tras el solemne traslado del Viernes de Dolores de los Sagrados Titulares a la Finca «El Portón», donde, además de una muy buena afluencia de público, se vivieron momentos muy emocionantes llegó, por fin, el Domingo de Ramos.
Previa al inicio de la estación penitencial, ante las Sagradas Imágenes de la Cofradía, tuvo lugar como ya es habitual la presentación de niños nacidos en el último año de la mano de Manuel Molina Gálvez entre los que se encontraba el pequeño Gustavo, nieto de nuestro hermano fallecido Paco Peral, presente a través de él y en el corazón de los hermanos y hermanas de la Cofradía y, de forma muy especial, en la procesión ya que, tanto el Cristo como la Virgen portaban una pequeña cantidad de sus cenizas y el jefe de procesión y antiguo Hermano Mayor, Juan Ignacio Castillo, de nazareno, que llevaba en su pecho el escapulario que Paco lucía cada Domingo de Ramos, además en la oración previa a la salida de los hombres de trono se rogó y dio gracias por la pronta y feliz recuperación de nuestro hermano y Fiscal de la Cofradía Santiago Gutiérrez Rull a quien pronto volveremos a tener con nosotros.
A continuación llegó el turno para la Camarera Mayor de la Cofradía, Paqui Riscos, quien este año tuvo el honor de dar los primeros toques de campana al trono y quien, muy emocionada, pidió a los Titulares salud y trabajo para todo el mundo.
A las once de la mañana, como está establecido, salió la Cruz Guía por la puerta principal de la Finca «El Portón» a los sones de la marcha Real interpretada por la Banda de Cornetas y Tambores de Ntro. Padre Jesús (los «Moraos») y de la Banda Municipal de Música de Alhaurín de la Torre, que durante todo el recorrido hicieron gala de su buen hacer musical.
Tras la cabeza de procesión, la auténtica esencia de nuestra Cofradía, la algarabía humana más pura e inocente que con su alegría inundan las calles de nuestro pueblo: los cientos de niños y niñas vestidos de hebreo que acompañan la procesión con las tradicionales palmas artesanales que la Cofradía encarga traer desde Elche, Alicante.
Y así, cada uno en su lugar, fue saliendo la comitiva procesional presidida por el Hermano Mayor, José Ramos Ocaña y entre los que se encontraban el Alcalde de la localidad y Diputado Nacional en Cortes, D. Joaquín Villanova Rueda, parte de la Corporación Municipal y las distintas autoridades civiles del pueblo además de los hermanos mayores y representantes de las Juntas de Gobierno de las cofradías hermanas locales, «verdes» y «moraos», hasta llegar al momento en que el trono que, de momento, el Señor y la Virgen comparten, salió en torno a las once y media de la mañana de «El Portón» y que escoltaban sus Mayordomos de Honor, los fusileros del Regimiento de Línea Suizo de Reding, nº 3 pertenecientes a la Asociación Histórico Cultural «Teodoro Reding».
Con un ritmo pausado pero lleno de elegancia, acompañados por la tercera formación musical presente en el cortejo, la Agrupación «Virgen de las Angustias» de Cabra (Córdoba), paseó majestuoso por su recorrido el Señor de la Paz y el Amor y su bendita Madre, María Santísima de la Esperanza que este año estrenaba una diadema de plata regalo de las mujeres portadoras de la Señora en el Traslado y que vestida en elegantes tonos blancos sirvieron para que mucha gente empezara a llamarla «la Novia de Alhaurín».
Las principales novedades que la Cofradía ha presentado este año en la procesión son los dos faroles que acompañaron a la Cruz Guía, la diadema y el rosario de la Virgen, además de su vestido, y el aumento significativo del número de nazarenos en la sección de la Virgen.
En torno a las tres de la tarde, llegó el momento del encierro entre vítores a los Titulares que sacaron muchas, muchísimas lágrimas de los hermanos y hermanas de la Cofradía que junto a los hombres de trono entonaron el «Pescador de Hombres» a su entrada en la iglesia de San Sebastián donde esperarán, de nuevo, al próximo Domingo de Ramos.
En breve podrá encontrarse un amplio reportaje fotográfico en el apartado de fotografías de esta web.
Que bonita procesión tuvimos, los nazarenos pasamos un calor tremendo, pero mereció la pena, enhorabuena, todo salio genial!!!!