(Juan Ignacio Castillo). Nuestro Hermano Mayor, José Ramos Ocaña, tuvo ayer tarde 6 de Mayo, la oportunidad de poder ser el primer «Pollinico» en felicitar a nuestro querido hermano, amigo y consejero de esta Ilustre Cofradía, Agustín Soler Gálvez.
Y lo hizo por una sencilla a la par que poderosa razón y es que, como ya habíamos anunciado, Agustín ha sido el artista, sí artista, designado para llevar a cabo la realización del cuadro conmemorativo de la Salida Extraordinaria de Nuestro Padre Jesús de la Misercordia con motivo del 150º Aniversario de su primera salida procesional y cuya presentación fue ayer.
Y, como cabía esperar, Agustín no defraudó.
Y no lo hizo porque, además de ser un magnífico pintor, diplomado en la Academia de Bellas Artes «Ruiz Juan» y miembro del Colectivo Arte 21, Agustín tenía ante sí el reto pictórico más importante al que seguramente, hasta ahora, se haya «enfrentado»: Pintar a su Señor de la Misericordia, a ese por quien cada Jueves Santo malagueño se desvive desde que era un niño, a ese divino nazareno arrodillado y de rostro dulce y sereno que tallara José Navas Parejo, a su «chiquito perchelero».
No debe haber para un artista mejor honor y reconocimiento que ser, como se suele decir, profeta en su tierra. Y Agustín, en su Cofradía, lo es, y por derecho propio, y por buen cofrade, y por buen pintor y porque, seguramente, no exista nadie mejor que él para pintar, con motivo de tan magna efemérides, la soberbia obra de arte que se presentó ayer 6 de Mayo en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento de Málaga.
Una obra sensacional, inspirada en el arte del realismo figurativo malagueño del Siglo XIX que muestra, a la perfección, el motivo por el que la misma fue creada: La entrada en la Catedral de Málaga del Nazareno de la Misericordia que hinca su rodilla, como cada Jueves Santo, en ese monumental trono peana de carrete de camarín malagueño símbolo de la suprema majestad de quien porta.
Un óleo de tenues colores y texturas que invitan al pensamiento y a la reflexión, que muestran el amor incondicional del artista por su Sagrado Titular y que evocan la importancia de un momento histórico que, Dios mediante, se podrá vivir en Málaga el próximo 20 de Junio.
Querido hermano y amigo, desde ésta, tu otra Cofradía, tus hermanos «Pollinicos» queremos darte nuestra más sincera enhorabuena por tu obra y mostrarte nuestro agradecimiento por ser y hacernos sentir parte de tu vida cofrade de la que tanto aprendemos.
Agustín Soler Gálvez, Maestro, Felicidades.